Ya llegó la hora de comenzar nuestro viaje. Nuestras vacaciones las hemos planificado durante algún tiempo y lo tenemos todo preparado. Pero no sabemos exactamente que vamos a hacer con nuestro dinero. Esto puede suponer un problema a la hora de ponernos en marcha, ya que si no administramos bien el dinero con el que vamos, puede que esto nos pase factura.
A continuación vamos a clasificar algunos consejos, con la intención de que tengáis en mente algunos trucos para no pasar ningún susto durante vuestras vacaciones. Esperemos que sean de utilizada.
Como administrar nuestro dinero durante los viajes de vacaciones
Intenta elegir bien el destino. Ten en cuenta que vas a estar un tiempo limitado consumiendo y haciendo vida en un sitio totalmente diferentes al que tu estás acostumbrado. Intenta hacer un pequeño estudio de la calidad de vida del lugar. Además, si son sitios completamente turísticos y vas en temporada alta, seguramente tendrás que pagar un porcentaje un poco más alto por cualquier servicio.
Evitar las compras impulsivas es algo de suma importancia. Al lugar al que vamos, nos tendremos que mentalizar de que vamos con un presupuesto limitado. Intenta tener un alista de personas a las que les vas a llevar algún recuerdo y no comprar por comprar.
Intenta no hacer todas las comidas en la calle. Puede que tu habitación tenga una pequeña cocina. No quiero decir que todo lo que hagas sea en la habitación, pero sería una buena opción calibrar mas el consumo de comidas en la calle. Así podremos ir además a los sitios que más nos gustan o más famosos de la ciudad. Sería optar por gastarnos el dinero en los sitios realmente importantes.
Ahorrar en propinas. Se trata de una medida extrema, ya que en determinadas ciudades y países es algo tan común que es prácticamente una norma. Pero si no nos queda más remedio podríamos ahorrarnos el dinero de las propinas.
Estos son solo algunos consejos que podremos realizar durante las vacaciones o antes de estas. Con esto no nos saldrán las vacaciones gratis, pero si que nos ahorraremos algo, que después nuestro bolsillo nos agradecerá.